El mismo fin.


Si, fuiste mi cuento favorito, pero eso no significa que no leyera nada más.

Como todo libro tuviste un final y siendo mi favorito lo más probable es que no haya sido uno admirable.

Ya no me sorprenden nuestros últimos instantes.

Me gustan los finales crueles, los finales reales, no esos que te engañan,  esos que no hacen más que subir unos cuantos pisos antes de tirarte al vacío.

Es costumbre ya tu ausencia.

Es costumbre ya salir huyendo por el otro lado del cuarto u ocultar fantasmas debajo de mi cama.

Es costumbre ya empaparme en tu  sudor para después estar seca si me tocas.



Eres costumbre ya. 


P. de Lunas. 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Cuando el amor es tan profundo, no podemos alcanzarlo.

DECRETOS SILENCIOSOS.