A solas.
Suelo sorprenderme de mi misma, a veces no me reconozco.
En cada caída voy cambiando, voy golpeándome
una y otra vez en ese
vuelo inconsistente.
Aterrizo en placeres o aparentes desfogues
Me entretiene lo simple, no consigo lo magno.
Creo desastres en mis viseras; a pesar de mis escudos y mi
cabalgar
no consigo alcanzarme.
Caídas bonitas, suaves palabras, “no siempre hay que saber quién eres”
Estoy bajo la lluvia equivocada, me devuelvo, vuelo a huir.
Me entristecen mis heridas, me consuelo con calmantes.
Recibo lo que merezco… me espero y nunca vuelvo.
.
Me gustas cuando te leo
ResponderEliminarEres una flor abierta en un terrero volcánico
ResponderEliminar<3
ResponderEliminar